Desde los primeros proyectos de centros de datos, la conectividad ha sido un aspecto fundamental. ¿Cómo observa la evolución de las redes terrestres y submarinas a medida que los edge data centers se vuelven cada vez más importantes para la descentralización de las infraestructuras digitales?
La evolución de las redes terrestres y submarinas es esencial en este nuevo escenario de descentralización y, dentro de lo posible, ha acompañado la creciente demanda de baja latencia y alta capacidad de los centros de datos edge.
Los cables submarinos siguen siendo la columna vertebral de la conectividad global y están evolucionando para soportar la descentralización digital. Los proyectos modernos utilizan fibras ópticas de mayor densidad y tecnologías como la multiplexación por división de longitud de onda (WDM), lo que aumenta la capacidad de transmisión. Se están implementando nuevas rutas más directas con menores tiempos de respuesta entre continentes, y empresas de hyperscalers (Google, Microsoft, AWS) invierten directamente en la construcción de cables submarinos para garantizar una conexión más rápida y estable entre sus centros de datos en la nube y el edge.
En América Latina, Google ha destinado recursos a la mejora de la conectividad como parte de un compromiso de inversión de 1.200 millones de dólares en cinco años, anunciado en 2022. Estos esfuerzos incluyen la instalación de nuevos cables submarinos y la adquisición de servicios de telecomunicaciones para fomentar un desarrollo económico inclusivo y sostenible.
El EllaLink, inaugurado el 1 de junio de 2021, es un cable submarino de fibra óptica que conecta directamente Fortaleza, en Brasil, con Sines, en Portugal. Con una extensión de aproximadamente 6.000 kilómetros, ha reducido la latencia a menos de 60 milisegundos entre ambos continentes, mejorando significativamente la velocidad y la calidad de la transmisión de datos.
En el escenario global, las redes terrestres están volviéndose más distribuidas, y en Brasil, por ejemplo, también se están realizando nuevas inversiones que ya están saliendo del eje Río – São Paulo, permitiendo la interconexión eficiente entre centros de datos regionales y los usuarios finales.
En enero de 2022, el Ministerio de Comunicaciones anunció la posibilidad de captar hasta 925 millones de reales en debentures para proyectos de implementación de redes de telecomunicaciones. Esta iniciativa tiene como objetivo expandir y modernizar la infraestructura terrestre, mejorando la conectividad en diversas regiones del país.
Estos proyectos buscan implementar fibras ópticas de alta capacidad, mejorando considerablemente la conectividad entre las infraestructuras distribuidas. Además, incorporan tecnologías SD-WAN, redes definidas por software y automatización, lo que permite la optimización dinámica del tráfico entre los centros de datos edge y la nube, reduciendo la latencia y mejorando la eficiencia.
Por último, la interacción del 5G con las redes terrestres amplía la capacidad de comunicación entre dispositivos y centros de datos edge, reduciendo congestiones y mejorando la entrega de servicios en tiempo real.
Con estos avances, la interconexión entre los centros de datos edge y la infraestructura global se volverá más robusta, garantizando escalabilidad para futuras demandas tecnológicas.
Existen opiniones de que el mercado de edge data centers está tardando en alcanzar el nivel de desarrollo esperado. ¿Está de acuerdo con esta percepción? ¿Qué factores explican su opinión al respecto?
El mercado de centros de datos edge ha avanzado, pero no con la velocidad inicialmente proyectada. Hay razones tanto técnicas como económicas para ello, lo que ha llevado a una adopción gradual debido a diversos desafíos:
- Alto costo de implementación: Construir y operar centros de datos edge requiere grandes inversiones en infraestructura, energía y conectividad. Además, la descentralización genera desafíos operativos, ya que múltiples unidades deben gestionarse de manera eficiente.
- Demanda fragmentada y casos de uso en evolución: Aunque el potencial del edge computing es innegable, muchos sectores aún están evaluando cómo utilizarlo de manera rentable. Aplicaciones como vehículos autónomos, IoT industrial y realidad aumentada aún están en fase de adopción, lo que retrasa la necesidad de una infraestructura masiva.
- Desafíos en conectividad: A pesar de los avances en redes terrestres y 5G, no todas las regiones cuentan con infraestructura robusta para permitir la interconexión eficiente entre centros de datos edge y la nube.
- Complejidad de integración con la nube: Muchas empresas aún están consolidando sus estrategias en la nube antes de expandirse al edge, lo que requiere soluciones híbridas más maduras.
- Retorno sobre la inversión (ROI) aún en evaluación: El costo-beneficio del edge computing sigue siendo analizado, y muchas empresas prefieren esperar una mayor claridad sobre los beneficios en eficiencia y reducción de latencia antes de invertir a gran escala.
Aunque el desarrollo del mercado es más lento de lo esperado, los avances tecnológicos continúan, y el crecimiento de soluciones IoT, IA y robótica impulsará la adopción de centros de datos edge en los próximos años.
Cuando comenzó a discutirse el 5G, surgieron varias preocupaciones entre los profesionales de centros de datos sobre la integración de esta nueva tecnología con la infraestructura existente. ¿Cómo evalúa la capacidad de la industria para abordar estas preocupaciones y proporcionar la infraestructura adecuada para viabilizar el desarrollo de estas redes?
Cuando se empezó a discutir el 5G, surgieron varias preocupaciones sobre la integración de la nueva tecnología con la infraestructura existente. En mi opinión, algunas resultaron válidas, otras no. Estas preocupaciones eran:
- Exigencia de baja latencia y procesamiento distribuido.
- Aumento exponencial en el tráfico de datos.
- Desafíos de energía y refrigeración para soportar una mayor densidad de procesamiento.
- Interoperabilidad con la infraestructura existente, lo que exige inversiones en nuevas tecnologías.
- Seguridad y riesgos cibernéticos.
La industria ha respondido a estos desafíos con importantes avances:
- Se ha incrementado la inversión en edge computing para reducir la latencia y optimizar la entrega de servicios críticos.
- Se han adoptado arquitecturas de red como SDN (Software-Defined Networking) y NFV (Network Functions Virtualization) para garantizar flexibilidad y escalabilidad.
- Las empresas del sector han desarrollado soluciones más eficientes de refrigeración y consumo energético para mejorar la sostenibilidad.
- Se han implementado nuevos protocolos de seguridad y herramientas basadas en IA para monitorear amenazas y prevenir ataques.
A pesar de los desafíos iniciales, la industria ha evolucionado para soportar el 5G de manera eficiente, alineando la infraestructura de centros de datos con las necesidades de esta nueva generación de redes.
¿Cómo evalúa el ritmo de desarrollo de la infraestructura digital para atender la demanda de IoT y posibilitar los avances que ofrece esta tecnología?
El desarrollo de la infraestructura digital para IoT ha avanzado, pero aún enfrenta desafíos que limitan su adopción masiva.
Factores positivos:
- Expansión del 5G y redes de baja potencia: El 5G se está implementando en las principales ciudades y facilitará aplicaciones de IoT que requieren baja latencia y alta velocidad. Además, redes como LoRaWAN y NB-IoT se están utilizando en sectores como la agricultura, las ciudades inteligentes y la industria 4.0.
- Inversión en centros de datos y edge computing: Empresas como AWS, Microsoft y Google están expandiendo su presencia en países como Brasil, fortaleciendo la infraestructura digital.
- Crecimiento del agronegocio digital y las ciudades inteligentes: Sensores conectados están revolucionando la producción agrícola, mientras que proyectos urbanos como semáforos inteligentes y monitoreo ambiental avanzan.
Desafíos a superar:
- Cobertura de red limitada: Afecta especialmente a sectores como el agronegocio y la infraestructura pública.
- Altos costos de implementación: Gran parte de los sensores, equipos y tecnologías son importados, lo que incrementa los costos.
- Regulación y estándares: La falta de normativas estandarizadas dificulta la interoperabilidad y plantea preocupaciones sobre ciberseguridad y privacidad de datos.
Estamos viendo avances en infraestructura IoT, pero acelerar su desarrollo requerirá colaboración entre el sector público y privado, además de políticas que fomenten su adopción en distintos sectores.
¿Qué cree que depara el futuro para la convergencia entre edge computing, redes móviles y data centers, y cómo esta evolución moldeará la próxima generación de infraestructura digital?
La convergencia entre edge computing, redes móviles y centros de datos está transformando la infraestructura digital, haciéndola más distribuida, inteligente y eficiente. Este cambio permitirá la creación de nuevas aplicaciones y servicios que requieren latencia ultrabaja y conectividad constante.
Estamos construyendo una gran red neuronal que será la base de las innovaciones impulsadas por la inteligencia artificial. La evolución de estas tecnologías impulsará avances en automatización, procesamiento en tiempo real y nuevas soluciones para sectores como la salud, la industria y el transporte.