El Barcelona Supercomputing Center – Centro Nacional de Supercomputación (BSC - CNS) puso en marcha en septiembre el superordenador MinoTauro. Tan solo dos meses después, esta máquina ha sido considerada como la más eficiente energéticamente en Europa, según el ranking Green 500.
Esta clasificación internacional valora la relación entre la capacidad de cálculo de un supercomputador y su consumo de energía. En el ranking internacional, el supercomputador del BSC se sitúa en séptimo lugar.
A este hito del MinoTauro se une otro más: ocupa la posición 114 de la lista Top500, que clasifica los superordenadores más potentes del mundo.
La arquitectura utilizada para este equipo, por otra parte, se sitúa en tercera posición en eficiencia energética, solo superada por las arquitecturas BlueGene y ATI. Basado en un sistema de nodos bullx equipados con procesadores Intel y GPUs de Nvidia, cuenta con una eficiencia de 1.266 MFLOPS/W, mientras que la primera máquina, de IBM-Rochester, tiene un ratio de 2.026 MFLOPS/W.
Para establecer este ratio de eficiencia, el Green 500 utiliza una métrica determinada por los millones de operaciones flotantes por segundo (MFLOPS), divididas por los vatios consumidos por el supercomputador.
“La eficiencia energética debe ser una de las prioridades a la hora de diseñar y trabajar con supercomputadores. El BSC-CNS es consciente de la necesidad de proporcionar máquinas más potentes para los científicos, pero es importante que sean más sostenibles, tanto a nivel medio ambiental como económico”, indica Mateo Valero, director del BSC-CNS.
“Es ésta, pues, una de las iniciativas del centro para conseguir capacidad de supercomputación de exaflop con sostenibilidad”, añade.
La arquitectura del MinoTauro con procesadores de propósito general y GPUs no es particularmente adaptable a la preparación de aplicaciones. En este sentido, el BSC-CNS ha desarrollado el modelo de programación OmpSs, que facilita el desarrollo de aplicaciones en entornos distribuidos y heterogéneos.
Dicho modelo de programación es capaz de paralelizar de manera automática las aplicaciones y gestionar de manera eficiente los recursos de la arquitectura del computador.
Reconocimientos del BSC
La pasada semana, el BSC - CNS anunciaba su reconocimiento como Centro CUDA de Excelencia. Entre sus objetivos, se encuentra el de proponer y diseñar entornos de programación para clusters de GPUs, en especial el entorno de ejecución GMAC y el modelo orientado a tareas StarSs, ambos diseñados en el BSC – CNS y la optimización de aplicaciones.
También este año, el Centro Nacional de Supercomputación ha sido nombrado Centro de Excelencia Severo Ochoa por el Ministerio de Ciencia e Innovación (MICINN) en el apartado de Ciencias Físicas e Ingenierías. El BSC-CNS fue uno de los ocho centros de investigación españoles en obtener este reconocimiento, hecho que lo consolida como uno de los mejores del mundo en su área de investigación.