Según ciertos informes, el mundo entero –data centers incluidos, se encontrarán de nuevo bajo la amenaza de las tormentas solares, una fuerza natural capaz de dejar fuera de juego a los satélites y al equipamiento eléctrico y de telecomunicaciones.

La temporada de tormentas solares, según la NASA, comenzará esta semana, con una serie de llamaradas solares (grandes cantidades de energía que se despiden en forma de campos magnéticos desde el sol).

La NASA señaló que el sol alcanza este año el punto máximo de su ciclo solar de 11 años, por lo que las llamaradas solares serán más regulares y severas.

La peor tormenta solar tuvo lugar en 1989, según la NASA.

"La explosión salpicó la Tierra con los protones más energéticos en  medio milenio, provocó corrientes eléctricas que causaron fuegos en las oficinas de telégrafos, y generó auroras boreales en Cuba y Hawai", dijo la NASA.

En un artículo en el website de la NASA, la física Lika Guhathakurta señaló que una tormenta similar hoy en día podría dejarnos fuera de juego.

“La sociedad moderna depende de muchos sistemas de alta tecnología, como GPS o satélites, o redes eléctricas inteligentes, que son muy vulnerables a las tormentas solares,” explicó Guhathakurta said.

La investigadora declaró que una tormenta solar tiene la capacidad de dejarnos sin corriente eléctrica durante semanas y meses, provocando que bancos y redes financieras queden fuera de servicio, interrumpiendo la actividad comercial.

“Según un informe de 2008 de la Academia Nacional de Ciencias, una tormenta solar de las que se dan cada cien años podría tener un impacto económico de 20 huracanes Katrinas”, subrayó la NASA.

El blogger de DatacenterDynamics Peter Hannaford, director general de Datacenterpeople, analizó los efectos que un evento de este tipo podría tener en los dta centers en un post del 9 de junio.

En él se refería a un evento ocurrido en 1989, con la intención de que los operadores de data center sean conscientes del riesgo.

“Una tormenta solar durante 1989 provocó que toda la red eléctrica de Hydro-Quebec cayera, dejando a millones de residentes de la zona noreste de Canadá sin corriente eléctrica durante más de nueve horas”, comentó Hannaford.

“El suceso también fue la causa del fallo de un transformador en una planta nuclear en Nueva Jersey”.