Según recoge el Proyecto de Ley de Presupuestos Generales de la Comunidad de Castilla y León para 2018, la Junta destinará  1,2 millones para la Fundación del Centro de Supercomputación, con sede en León. De ellos, 300.000 servirán para acometer una actualización tecnológica de la máquina Caléndula.

Precisamente el superordenador Caléndula ha aportado 480.000 horas de cálculo para el proyecto de investigación dirigido por el laboratorio LiGO en los Estados Unidos, cuyos tres fundadores han sido galardonados con el Premio Nobel de Física 2017.

Este año dicho premio ha recaido en los estadounidenses Rainer Weiss, Barry Barish y Kip Thorne por la detección y observación de ondas gravitacionales en el experimento LIGO.

Además de Caléndula, en este proyecto han participado otros superordenadores integrados en la Red Española de Supercomputación RES, como MareNostrum del Barcelona Supercomputing Center y Finisterrae operado por el CESGA.