Cambiar 30 líneas de código en Linux podría reducir el consumo de energía en algunos centros de datos hasta en un 30 por ciento, según han afirmado unos investigadores.

Los científicos informáticos de la Universidad de Waterloo, en Canadá, han afirmado que una pequeña modificación del código Linux que utilizan muchos centros de datos para procesar paquetes de tráfico de red puede suponer una reducción significativa del consumo de energía. El sistema operativo de código abierto Linux es el sistema operativo más utilizado en los servidores de los centros de datos.

A través de su investigación, Martin Karsten, profesor de informática en la Facultad de Matemáticas de la Universidad de Waterloo, y el estudiante de posgrado en informática Peter Cai, descubrieron que la forma en que los centros de datos procesaban los paquetes de tráfico de red era ineficiente, e idearon un pequeño cambio para hacerlo mucho más eficiente.

“No añadimos nada”, dijo Karsten. “Simplemente reorganizamos lo que se hace y cuándo, lo que permite un uso mucho mejor de las memorias caché de la CPU del centro de datos. Es como reorganizar la cadena de suministro en una planta de fabricación, de modo que no haya gente corriendo de un lado a otro todo el tiempo”.

Karsten se asoció con Joe Damato, ingeniero destacado de la empresa de redes de distribución de contenido Fastly, para desarrollar una pequeña sección de código (aproximadamente 30 líneas) que mejoraría el procesamiento del tráfico de red de Linux. Si se adopta, el nuevo método podría reducir el consumo de energía de importantes operaciones de centros de datos hasta en un 30 por ciento.

El equipo ha probado la eficacia de su solución y ha enviado a Linux para su consideración, y el código se publicó este mes como parte del kernel más nuevo de Linux, la versión de lanzamiento 6.13.

“Todas estas grandes empresas –Amazon, Google, Meta– utilizan Linux de alguna manera, pero son muy exigentes en cuanto a cómo deciden utilizarlo”, dijo Karsten. “Si deciden “activar” nuestro método en sus centros de datos, podrían ahorrar gigavatios hora de energía en todo el mundo. Casi todas las solicitudes de servicio que se realizan en Internet podrían verse afectadas positivamente por esto”.

La Universidad de Waterloo está construyendo una sala de servidores informáticos ecológica como parte de su nuevo edificio de matemáticas. Karsten cree que la investigación sobre sostenibilidad debe ser una prioridad para los informáticos. “Todos tenemos un papel que desempeñar en la construcción de un futuro más ecológico”, afirmó.

La Fundación Linux, que supervisa el desarrollo del sistema operativo Linux, es miembro fundador de la Green Software Foundation, una organización creada para buscar formas de desarrollar “software verde”: código que reduce el consumo de energía.