Debido al aumento de la densidad eléctrica, se ha incrementando la demanda de sistemas de energía ininterrumpida mayores a 500KW. Los principales fabricantes ofrecen UPS de estado sólido de hasta 1 MW de capacidad con algunos que llegan hasta 1.6 MW en una sola unidad.

Para lograr estos valores, se ha trabajado en sistemas modulares para aumentar la eficiencia de operación y reducir al mismo tiempo las fallas catastróficas. Los nuevos UPSs mayores a 500 kVA se construyen sin transformador o con autotransformadores, ya que éstos pueden representar el 30% del costo del equipo e impactar hasta 50% las pérdidas del UPS.

Tecnológicamente hablando, hay muy poco que se puede mejorar en términos de desempeño de los UPSs, debido a que en la actualidad ya existen equipos ultra eficientes que rebasan el 96%; la distorsión armónica está siendo erradicada y la modularidad y facilidad de mantenimiento están ayudando a hacer más confiables los sistemas.

Los nuevos UPSs que se desarrollen en el futuro incorporarán mayor inteligencia y capacidad para administrar de forma más inteligente sus recursos, proveerán más información sobre su tiempo de operación y necesidades de mantenimiento y se integraran más fácilmente con sistemas de monitoreo y dispositivos móviles.

Los beneficios adicionales que aporta una marca sobre otra son muy importantes en el momento de elección de un UPS, ya que no basta con conocer las capacidades del producto, sino que es necesario conocer el servicio que los acompaña como el soporte técnico, confiabilidad de la marca, garantías y puntos de venta, mantenimiento, asesorías, refacciones y en algunos casos, la instalación.